No soy lo
que se dice una persona con los dedos pegados a un teclado, peeeero claro, no
hay nada como despertar por la mañana y encontrarse con la siguiente noticia,
acerca del rotundo éxito que ha tenido una iniciativa del Gobierno Vasco, para
que la inspiración fluya sola.
Aunque en
teoría la idea está muy bien, luego lo de llevarla a la práctica empieza a ser
un pelín complicado.
Primero,
vamos a situarnos un poco…
En España,
de todos es sabido, que ha habido una crisis económica que ha devenido en una
espantosa hecatombe laboral, donde la destrucción del tejido productivo en
muchos sectores ha sido brutal.
Mucha gente
para su desgracia, que de la noche a la mañana se ha visto de patitas en la
calle, no ha tenido más opción que hacer las maletas y buscar fortuna en el
otro lado del mundo, entre los cuales se cuenta no sólo a una legión de
universitarios con su titulito recién horneado, pero sin más perspectivas que o
bien estudiar masters ad infinitum, o
bien saltar de mierdaempleo en mierdaempleo a años luz de lo que han estudiado. También hablamos de un ingente número de
profesionales que cuentan con una más que aceptable rodadura laboral en puestos
de relativa importancia, que han tenido o bien el valor o bien la
desesperación, de intentar abrirse paso fuera de nuestras fronteras.
Y aquí
tenemos de todo, como en botica.
Hay gente
que las ha pasado muy pero que muy putas, bien porque no se manejan con el
idioma o bien porque jamás han salido de su zona de confort, o simplemente por
el brutal choque que supone pasar de ser jefe de proyectos en España a tener
que empezar en Reino Unido sirviendo pintas en un Wetherspoon porque la niña de
mis ojos habla mejor inglés.
Hay gente
que ha tirado la toalla porque no aguantaban más, y gente que a base de
esfuerzo y sacrificio ha empezado poco a poco a subir peldaños en la escalera
profesional, se lograrán hacer valer y progresarán, y al final conseguirán
tener una condiciones laborales y una consideración profesional que va a estar
a años luz de lo que han conocido hasta la fecha en España.
Ya sabéis a
que nos referimos… a la cara “B” de la historia, esa que no sale en españoles
por el mundo.
Pero
volvamos al inicio de esta entrada.
Alguna
lumbrera del gobierno vasco ha visto la oportunidad de sacar provecho de ello… Repescar
a la gente que se ha marchado fuera, con el propósito de que se beneficien las
empresas vascas de un capital humano, que se ha enriquecido de una manera que
de otra forma hubiera sido imposible conseguir. Gente que de venir, va a venir
con experiencia en sectores profesionales que o bien no existen o bien es casi
imposible encontrar actualmente en Euskadi porque no hay manera de formarlos
aquí… por no hablar que tras una estancia de varios años, vas a venir con un
nivel de inglés, francés, alemán por poner algunos ejemplos, que casi nadie en
tu entorno va a tener.
En primer
lugar, se compromete el gobierno vasco con aquellos que regresan, a pagar la
mitad del salario bruto del profesional durante el primer año, con un límite de
35.000€ por contrato. (Traducción: Que asumen que ni de coña una empresa en
Euskadi te va a pagar ni de lejos la pasta que cobras por ejemplo en Holanda o
en Canadá).
Porque a ver
si no como los repescas, maifrén.
Bien… eso el
primer año, ¿Y después?
Ahí no dice
nada, (Lo cual indica que tu salario luego se verá reducido a la mitad).
Es altamente
probable, que la haya pergeñado algún funcionario autonómico, que no tiene ni
puta idea de lo que es trabajar en el sector privado, y no digamos ya de hablar
de buscarse las habas en el extranjero. O al que se le ha ocurrido semejante
medida no tiene ni puta idea de cómo son las cosas profesionalmente fuera de
España, o bien se piensa que un españolito trabajando de ingeniero en Dinamarca
va a trabajar de lo mismo en España por el sueldo que cobra el personal de
limpieza de la oficina.
Y luego las
empresas se quejan de que no encuentran mano de obra cualificada, que tienen
muchos puestos vacantes sin cubrir…
Mano de obra
la hay a patadas, y de una calidad formidable, los tienes disponibles en la
franja de edad de los 35 a los 55 años en abundancia, gente con muchas horas de
vuelo, experiencia, saber hacer, formación y entusiasmo, breada en mil y una
situaciones difíciles que se las saben todas… Pero claro, si buscas mano de
obra de calidad alemana, pero ofreces condiciones nigerianas, confórmate con lo
que encuentres
Dicho en
corto: Que se creen que somos gilipollas.
En fin…