Brexit - ¿Y ahora qué?

Pues si amigos…

La mañana del pasado 24 de Junio el mundo desayunó con el que tal vez sea el acontecimiento por el cual va a ser recordado el año 2016 en el futuro.

Reino Unido vota por darse el bote de la Unión Europea.

No voy a añadir gran cosa a lo que ya se ha dicho, basta con leer las estupendas entradas de Pelocha, Arabella o la de Paquito para hacerse una opinión al respecto.

Pero si hay una serie de aspectos que a mí particularmente me han llamado la atención.

El referéndum como tal ha sido una chapuza, desde el momento en el cual no se ha definido un porcentaje mínimo a partir del cual se puede considerar, que la mayoría del pueblo británico ha dado su opinión. Si la opción ganadora lo hace por un solo voto ¿Es eso la mayoría del pueblo británico? Otro tanto cabe decir de la participación, esta ha sido bastante alta (Un 72,2% Aprox.), pero la verdad, si hubiera sido de un 35% ¿Representa eso igualmente a la sociedad británica?

Por otro lado, es perfectamente comprensible que te quieras marchar de la Unión Europea, bien sea porque no te gusta como está siendo gestionada, o bien porque ya no compartes sus objetivos y valores, o bien porque simplemente, consideras que tus intereses están mejor defendidos desde fuera que desde dentro. Pero una de las razones por las cuales mucha gente se ha decantado por la salida, ha sido el desprecio y el odio hacia la Unión Europea, una xenofobia mal disimulada en muchos casos, que con la victoria del Brexit, ha provocado un notable incremento de agresiones de indudable corte racista.

Podría haber sido un divorcio amistoso, pero el odio y el desprecio no se han molestado lo más mínimo el ocultarlo. Ni que decir tiene que eso va a pesar, y mucho en la relación venidera con la  Unión Europea.

Se ha hablado mucho del impacto económico que va a tener la salida del Reino Unido, pero las consecuencias políticas en mi opinión son a largo plazo mucho más dañinas si cabe por los siguientes motivos:

Desde Bruselas, han sido rotundos, se les ha terminado la paciencia con el Reino Unido, el mensaje desde el primer día ha sido claro y contundente: Les han dicho que ya que se quieren marchar que pidan la salida cuanto antes mejor, que no va a haber ningún tipo de negociación previa respecto a las condiciones, que la ruptura es al completo, dicho en corto, que se olviden de un divorcio a la carta. Que si quieren negociar algo con la Unión Europea, eso se hará una vez se hayan salido, pero nunca antes.

El Reino Unido es el pie que tiene Estados Unidos en la Unión Europea, es su mejor valedor e intermediario, y quién mejor defiende sus intereses, pudiendo ser esto mismo aplicable a la Commonwealth. Con la marcha del Reino Unido, está claro que la relación privilegiada que han mantenido Reino Unido y Estados Unidos durante décadas se va a resentir, lo cual hará que pierdan los británicos mucho peso político no ya sólo en Europa, sino a escala global al no tener al Tío Sam detrás para apoyarles tan incondicionalmente como lo han hecho hasta ahora.

Otro problema que les va a explotar, esta vez doméstico, es el de Escocia. Han votado los escoceses de forma inequívoca por la permanencia en la Unión Europea, de hecho, cuando tuvo lugar el referéndum de secesión en 2014 el eje central de los detractores de la independencia era la marcha automática de Escocia de la Unión Europea si abandonaban el Reino Unido… Argumento que ahora puede justificar la salida de Escocia del Reino Unido, el querer marcharse del Reino Unido para seguir siendo parte de la Unión Europea en el futuro, problema que también se puede hacer extensivo a Irlanda del Norte o Gales, no siendo descartable que el Reino Unido estalle como proyecto político secular.

Y luego tenemos Gibraltar de por medio… Ni que decir tiene que el día después el gobierno español va a cerrar  toda comunicación terrestre con la colonia, lo cual les va a causar un perjuicio económico enorme. Aparte de que cualquier negociación posterior de la índole que sea que los británicos quieran llevar a cabo con Bruselas, se topará con que el gobierno español les va a poner delante la roca, con el cual tendrían que tragar, so pena de tener que volverse con las manos vacías al otro lado del canal… Porque si algo está bien claro es que el gobierno español con las ganas que le tiene a los llanitos no va a dejar pasar la oportunidad.

Aunque la verdad, formalmente todavía ni se ha solicitado formalmente la salida de la Unión Europea.

Desde luego, se avecinan tiempos interesantes.

Antxon Urrutia.